El encuentro se realizó por ZOOM con un numeroso público que disfrutó de los conocimientos y la capacidad de relación del ponente con la historia, la obra, los ascendentes y las tribulaciones del poeta granadino.
Nos quedamos con la idea de que Federico
fue un genio con una enorme necesidad de expresar su dolor y su perplejidad
social y que ante la imposibilidad de hacerlo abiertamente, creó un mundo simbólico
que compartió como un grito empecinado, alejado de esa imagen frívola y
juerguista, tan extendida, que no puede ocultar su tremenda obra poética,
plasmada en sus poemas, su teatro y sus dibujos. Pero mejor escuchen al propio
Plaza Chillón, no se pierdan detalle.
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