***Vídeo de la tertulia al final
Cuando empezó esta cuarentena había
empezado a preparar una conferencia sobre D. Beníto Pérez Galdós para recordar
el centenario de su fallecimiento y celebrar su obra. No sé qué ocurrirá, pero
os dejo el introito que hice anteayer para dar comienzo a la Tertulia de la
Asociación de Mujeres Universitarias de Marbella que este mes han leído en
homenaje “Tristana”.
Benito Pérez Galdós nació en las Palmas de Gran Canaria en 1843, el último de 11 hermanos.
Su desarrollo estuvo determinado en mi
opinión por dos circunstancias:
1.- Es una infancia llena de crónicas
sobre acontecimientos históricos de orden bélico en los que su padre participó
como militar de carrera. Como la Guerra de la Independencia.
2.- Su enamoramiento que su madre
consideró de orden “incestuoso” con su prima hermana Sisita y que se solucionó
mandándolo a Madrid a estudiar Derecho.
-Durante su infancia y juventud fue un
intelecto curioso y crítico, escribía en periódicos y revistas, artículos con
una gran ironía. También dibujaba, algo que no mucha gente conoce. Sus trabajos
estaban llenos de gente, pueblo y realidad, humor y crítica por la
incoherencia. Uno de sus dibujos ironizaba sobre el teatro que se había construido
ceca del mar y al que muchos vecinos auguraban un futuro acuático. Él lo dibujó
como un escenario donde nadaban peces y otras especies marinas.
-En Madrid estudió menos Derecho y
muchos más el callejeo y la fauna humana que se concentraba allí en la segunda
mitad del siglo XIX: políticos, escritores, comerciantes, vividores,
buscavidas, profesionales a la española y pobres supervivientes. Y entre toda
esa fauna toda la variedad de mujeres en su escalafón económico y social.
-Galdós se formó durante un tiempo en
el que el Romanticismo coleaba pero él, con capacidad superdotada de
observación de la realidad, sus viajes y sus lecturas despertó al Naturalismo, al
Realismo de Dickens y Èmile Zola.
-En nuestra sociedad, descubrió
costumbres y defectos que con los que se atrevió a envolver a sus personajes
creando tipos reconocibles por toda la sociedad de ese tiempo lo que lo acerca
poderosamente a Miguel de Cervantes. Esos personajes pertenecen al Universo
Galdosiano y surgen en todas sus novelas, unas veces como principales otras
como secundarios, algo parecido a lo que hizo William Falkner. Lo que es
extraordinario es su memoria que se vierte en su coherencia narrativa, no hay
fisuras en el Universo Galdosiano.
-Galdós detectó una sociedad
adoleciente de los defectos de aparentar, de gastar por encima de las posibilidades,
de la sexualidad femenina como instrumento y dentelladas al honor de un ser
vulnerable y sin posibilidades, de enchufismo institucional, de clientelismo, fanatismo,
hipocresía, donde se convivía con el sablazo y la pillería más lazariana.
Mostró con realismo una visualización de la desgracia y si es verdad que tuvo
enemigos es verdad que a su entierro fueron cientos de personas de todo tipo,
el pueblo de Madrid.
-Muy de reseñar es la facilidad que
tuvo Don Benito para plasmar en el papel algo más que el lenguaje, más preciso,
algo que he dado en llamar el habla verbal y no verbal de las distintas clases
sociales, sexos, gremios, especialmente las populares.
-Murió en 1920 con 77 por lo que este
año extraño y confinado celebramos el centenario de su fallecimiento. Es una
razón más para dedicar esta tertulia al escritor que no consiguió el premio
Nobel porque tenía bastantes enemigos entre los poderes que no querían oír ni
que se oyera sobre la miseria y la corrupción.
-Galdós tuvo una vida intensa, conoció
toda la intelectualidad de la época, a Clarín, a Giner de los Ríos y La
Residencia de Estudiantes y fue amante de Emilia Pardo Bazán y otras muchas
señoras. Sus relaciones lo hicieron amistarse con las corrientes liberales más progresista,
krausistas y feministas. Y consiguió que se visibilizara la irremediabilidad de
la mujer con una gran variedad de sus protagonistas femeninas en sus obras como
“Tristana”, “Fortunata y Jacinta”, “Misericordia”, “La de Bringas”…
-Fue diputado a Cortes en tres
ocasiones por más que no se sentía un político. Aún así, lo que parece
increíble es su extensa obra literaria formada por 46 novelas históricas del
siglo XIX llamadas “Episodios Nacionales” por lo que lo consideraron el
Cronista de España.
- Además de los Episodios Nacionales
escribió poesía, artículos en la Nación y otras publicaciones, teatro, y
novelas que fueron divididas en: Novelas de Tesis, Novelas Contemporáneas Españolas
y Novelas Espiritualistas muy influenciadas por sus lecturas de Leon Tolstoi, a
las que pertenece “Tristana”, y finalmente, las Novelas Mitológicas.
-Yo os invito además a leer sus
cuentos, son muy sorprendentes. Por ejemplo “La Conjuración de las Palabras” al
que podríamos considerar kafquiano si no fuese porque fue escrito antes de la
obra de Kafka. ¡¡¡Larga vida a la obra
galdosiana!!!
En el siguiente vídeo podéis ver por primera vez cómo trascurre una de
las Tertulias Literarias de AMUM, en esta ocasión, para conmemorar la obra de
Don Benito Pérez Galdós, la Tertulia de “Tristana”:
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