Ayer en el paseo marítimo se disputó la carrera a pie del triatlón, con conos habían señalado por donde podíamos ir los peatones, una vergüenza, porque muchos interrumpían a los corredores.
El colmo fue un señor que por c. tenía que coger por ese estrecho caminito que queda en el Marbella Club, por donde íbamos los aficionados, los corredores y él con una bicicleta con sidecar de bebé. Interrumpió a un corredor, por poco me pilla y como el sidecar es más ancho que la bici montó la rueda izquierda encima de las piedra y lo volcó.
Le dije qué qué hacía y empiezó a gritarme e insultarme llamándome gorda y a mandándome callar, mientras no hacía ni caso a la niña que había tirado y lloraba a moco tendido.
Cuando se iba gritándome gorda, porque no sabía otra cosa de mí que lo evidente, me he enfadado y le he llamado impotente, si lo conocéis pedirle disculpas de mi parte, porque yo no tengo ni voy a tener constancia de ello!!!
Ana E.Venegas
No hay comentarios:
Publicar un comentario