'Comprar, tirar, comprar': un documental sobre la caducidad programada de los bienes de consumo:
¿Cuántas veces has pensado que los móviles cada vez duran menos? ¿No te planteas cómo es posible que la batería de tu cámara de fotos se haya estropeado y no exista manera humana de encontrar otra en el mercado, si sólo hace un año que la compraste? Alguien se está forrando a nuestra costa y La 2 ha decidido contárnoslo todo en el documental 'Comprar, tirar, comprar', que se emitirá el próximo domingo 9 de enero a las 22.00 h.
Chips que se instalan en productos electrónicos para limitar su uso, baterías programadas para una duración límite de un año, medias que se estropean a los cinco lavados... ¿No te has planteado por qué las cosas ya no se hacen como antes?
Pues tranquilo, que no es que te estés haciendo mayor. El problema es que existe una práctica empresarial conocida como obsolescencia programada, que consiste en la reducción deliberada de la vida útil de los productos para incrementar su consumo.
El documental 'Comprar, tirar, comprar' (La 2, domingo 9 de enero a las 22:00 horas) hace un recorrido por la historia de la muerte programada de los bienes de consumo, impulsada por las empresas para incentivar las compras.
Una práctica que comenzó en los años veinte cuando las principales fábricas de bombillas pactaron en secreto que la vida útil de sus productos debería reducirse de 2.500 a 1.000 horas para multiplicar sus ventas.
"Esta práctica empresarial se ha convertido en la base de la economía moderna, a pesar de las terribles consecuencias medioambientales de un sistema que genera toneladas de residuos inútilmente", asegura la directora del documental, Cosima Dannoritzer.
Pues tranquilo, que no es que te estés haciendo mayor. El problema es que existe una práctica empresarial conocida como obsolescencia programada, que consiste en la reducción deliberada de la vida útil de los productos para incrementar su consumo.
El documental 'Comprar, tirar, comprar' (La 2, domingo 9 de enero a las 22:00 horas) hace un recorrido por la historia de la muerte programada de los bienes de consumo, impulsada por las empresas para incentivar las compras.
Una práctica que comenzó en los años veinte cuando las principales fábricas de bombillas pactaron en secreto que la vida útil de sus productos debería reducirse de 2.500 a 1.000 horas para multiplicar sus ventas.
"Esta práctica empresarial se ha convertido en la base de la economía moderna, a pesar de las terribles consecuencias medioambientales de un sistema que genera toneladas de residuos inútilmente", asegura la directora del documental, Cosima Dannoritzer.
No es que este a favor de esto ,pero si los bienes de consumo que tenemos ahora duraran igual que los de hace cuarenta años,mas de la mitad de las empresas tendrian que disminuir su produccion con el consiguiente aumento del paro.
ResponderEliminarSi seguimos pensando sólo en crecer y crecer, sin importarnos que otros no lo hagan y que otros lo hagan a costa de los derechos humanos, como China, tienes razón.
ResponderEliminarSin embargo a lo mejor es hora de pararse, reflexionar, mirar qué es lo que de verdad necesitamos, porqué gastamos en tantas otras cosas que no necesitamos realmente.
Si merece la pena pasarse toda la semana estresado para tener un coche super para ir a trabajar y pasarse el fin de semana tirado en el sofá hinchándose de chucherías porque estás reventado.
El valor de la amistad, la familia, los alimentos naturales, el deporte, ir al campo con los niños y una tortilla, pasar la tarde en casa con tus hijos ayudándole con sus estudios, construir entre tu pareja y tú la estantería del despacho, leerle un libro a tu madre que se ha hecho mayor, preparar un bizcocho con huevo y rayadura de limón, hablar con tu mejor amigo aunque hayas escuchado su historia dos millones de veces, dar clases de tus habilidades a otros en Cruz Roja, ver una película con un montón de amigos y hacer una tertulia, hacer un club de lectura y compartir los libros, entrar en Google y acceder al mundo de la cultura.......
Ana E.Venegas
Estamos confundiendo los temas ,veamos ,el que yo haga una estanteria un fin de semana y que me ponga los dedos jinchaitos de golpes no va ha evitar el consumismo exacerbado de la mayoria de la poblacion (solo de Homo Sapiens no Erectus)vaya a disminuir.
ResponderEliminarLa solucion pasa por mas cultura en la tele menos futbol,mas ciencia menos listillos(y listilla) en la radio etc.y valorar mas las cosas practicas y verdaderas,dejar la hipocrecia de lado y luchar por las ideas cada individuo ,formando al final una masa unida que ACOJONE a los politiquillos.HE DICHO.