Viernes noche en Marbella y tenemos
acontecimiento cultural de primer orden. Juan Pablo Yusto y Graciela Giner nos
proporcionan la posibilidad de disfrutar del video-arte del profesor de la
Escuela de Bellas Artes de Sevilla Juan Carlos Robles. Los amantes de lo
conceptual acuden en gran número. Otra vez han conseguido subyugarnos. "El Hereje contra las Normas" podemos ser todos.
Pasaban de las ocho de la tarde cuando nos
aventuramos en la Galería que Yusto&Giner tienen en el Polígono, frente a
la Playa del Cable. Ya por el camino no encontramos a varios amigos, dos de los
cuales nos preguntaron “si esto era arte”, esa pregunta más que desmotivarme me
azuzó la curiosidad, se convirtió en urgencia, aún no había llegado y ya había
gente haciéndose preguntas, íbamos por buen camino.
En el hall industrial del espacio cultural
nos recibió la primera pantalla, pero sólo iba a ser las crudités de la muestra,
porque el enorme e inmaculado espacio expositivo estaba ocupado, aire incluido,
de pantallas y visitantes en diálogo con la obra, ambos ávidos de expresión de
unos sentimientos provocados por las imágenes sacadas de sonido y sacadas de
contexto.
El ser humano tiene una humanidad muy
diferente cuando está en un todo colectivo, es capaz de la irracionalidad más
patética y Juan Carlos Robles ha sido capaz de mostrarnos el comportamiento
colectivo en manifestaciones religiosas, populares, desde la distancia que crea
la descontextualización y ante la soledad de un individuo como espectador en
una galería de arte. Ha sido doloroso comprobar que nuestras tradiciones
populares no son menos tribales que las de otros pueblos, que la cara de muchos
de nuestros compatriotas, que podría ser yo misma en la procesión de la patrona
de mi pueblo, no deja de parecerse al fanatismo de las manifestaciones
colectivas de otras creencias, que el individuo con capacidad crítica no es más que un ser desdibujado, mixturado.
En fin, si pueden no se la pierdan, mis dos
amigos escépticos, acabaron discutiendo, como todos los demás, sobre la
conversación de los persas desdibujados, en relación con la obligación de
cubrir las cabezas de las mujeres de su familia, y del significado de las
montañas de humanos frente a la individualidad de muy pocos, en realidad uno
sólo que mostraba otra de las video-creaciones. Me agradecieron que los hubiera llevado de
nuevo a ver las obras, aunque aún seguían preguntándose, “¿pero esto se
considera arte?”, para mí sí, Arte y mucho más.
Texto: Ana E. Venegas
Fotografía de Francisco Giménez y la propia Galería
No hay comentarios:
Publicar un comentario