El pasado jueves acudimos a un evento cultural interesantísimo por su fondo conceptual y por la originalidad del hilo conductor. Organizado por la Asociación de Mujeres Universitarias como respuesta a la invitación de la Delegación de Igualdad de Marbella, nos dimos cita en el Centro Cultural Cortijo Miraflores para disfrutar con la conferencia excepcional de la abogada, promotora de artista y parte de la Asociación de los Amigos del Museo del Traje de Madrid Eloísa Sánchez-Amilategui.
El aforo
estaba completo y la exposición estuvo ilustrada por numeroso material gráfico
y audiovisual procedente de los más prestigiosos centros de la cultura y la
sociedad de orden internacional como el Metropolitan Museum de Nueva York. La
presidenta, Garbiñe Larrazábal, tomó la
palabra para agradecer la invitación del ayuntamiento de Marbella para
continuar con nuestra labor de divulgación de la cultura en nuestra área de
influencia y la presencia de la Concejala del ramo, Isabel Cintado, que timoneó
al respetable, sentada en la primera fila.
Acto
seguido Eloísa tomó la palabra para llevarnos por un viaje a la historia,
posándonos de hito en hito en la situación social de la mujer a través de los
usos y eventos entorno a la moda. Una manera muy original para desentrañar una
evolución de dos siglos que llevó a la mujer del “Corsé al Pantalón” y que
podemos ver y oír en el vídeo que inicia este artículo.
Destacar el
gran papel del corsé en la historia y cómo las mujeres fueron esclavas de él, debiendo
ser llevado desde los siete años para acostumbrar a la fémina a aguantar, no
sólo la diabólica prenda interior sino también todo lo que la sociedad le
exigiese. A partir de la revolución francesa hubo movimientos ideológicos a
favor de la liberación del físico femenino y las obras de Lacroix con “La
Liberté” medio desnuda y portando banderas o armas era toda una declaración de
intenciones de lo que vendría después. Eloísa nos llevó por la época
napoleónica y el cambio al corte imperio inspirado en los descubrimientos
arqueológicos de Pompeya y Herculano. Pero el dichoso artilugio fabricado con
partes de una ballena real en muchas ocasiones, no dejó de oprimir nuestros
cuerpos y nuestras mentes hasta la Gran Guerra donde la mujer tuvo que ocupar
el puesto de los hombres en las fábricas y obviamente vestir de una manera
apropiada para ejercer con eficacia los trabajos, ahí llegaron los pantalones y
las faldas más cortas y ligeras.
La ponente
aprovechó la ocasión para homenajear a las sufragistas. Algunas, como Amelia
Bloomer, influyeron en los usos de vestuario trayendo al cuerpo femenino el
pantalón de inspiración turca “El Bloomer” con el que la mujer podría hacer
ejercicios como montar en bicicleta, aunque no estuvieron libres del escándalo
que supone todo lo que sea que la mujer se suelte el pelo o el corsé.
También
destacó la labor de grandes diseñadores que revolucionaron la moda femenina en
el siglo XX como Coco Chanel, inspirada por “Las Vanguardias”, con sus vestidos
cómodos, prácticos, de punto, sin estructura; o la de Cristobal Balenciaga con
sus vestidos barril y saco que nos liberaban de las imposiciones establecidas
como la atención a la tan celebrada “cintura de avispa”. No menos importante
fue la llegada del traje pantalón, tanto en smoking como en sahariana a la alta
costura de parte de Saint Laurent, produciendo una equiparación estética del
hombre y la mujer, símbolo de la aspiración de estar en puestos de poder del
sexo femenino. En otro orden fue mencionado Givenchy esta vez en la
democratización de la moda al llevar sus colecciones al Prêt-à-Porter.
Finalmente
la conferenciante, tras pasar por los años de la revolución sexual y la moda
Hippy, nos llevó por el “Dressing Power”, el que impusieron las mujeres más
influyentes en el poder político en los últimos años como Margaret Thatcher y
Angela Merker, dejándonos estampas de mujeres con el traje de chaqueta serio,
que adaptase John Redford a principio del siglo XX de la ropa de amazona y que
equipara a la mujer con el hombre sin olvidar esos toques ligeros de femineidad
que no son excluyentes.
En fin una
maravillosa conferencia que no deben perderse porque la historia, la lucha de
la mujer, el arte, las revoluciones y lo que pasa en la sociedad se refleja en
el vestido. “El Vestido es la expresión de la sociedad en qué vivimos” (Honoré
de Balzac).
Texto de Ana E.Venegas
Fotos y vídeo de José A.Correa
Me encanta la nota descriptiva del acto Ana, también podeis contar conmigo cuando deseeis para alguna conferencia en torno al tema del amor que vengo hace años trabajando y divulgando en mis artículos, libros y publicaciones así como conferencias y talleres
ResponderEliminarAbrazos
Fernando Gálligo Estévez