Siguiendo con las jornadas homenaje al prolífico y heterodoxo Agustín García Calvo, anoche nuestros sentidos fueron agasajados con un delicioso concierto junto a la muralla árabe de Marbella, en plena plaza de la Encarnación, contraste de piedra y fachadas blancas, blanquísimas que dejan boquiabierto a todos los visitantes.
En el ágora no cabía ni un alfiler, todas las sillas ocupadas y cientos de personas en pie, de donde no se movieron en la hora y media que duró el dispendio de sensibilidad que conformaban las letras de Agustín García Calvo y la música de la cultísima banda que ayer formaban Sine Die.
Hubo un derroche de melodías jocundas y meditativas, surgiendo de instrumentos variopintos, flautas dulces, travesera, bajos, guitarras, Mandolina, Bouzouki, Laúd y percusiones acopladas como una sola voz, para voz la prodigiosa casi trascendental de su intérprete femenina coreada por los músicos en algunas ocasiones.
Me encontré rememorando paisajes medievales, renacentistas, árabes o incluso orientales pincelados con vientos de jazz, llevada de la mano de los ritmos supremos de los arreglos que los hermanos Fernández han hecho para la PALABRA de Agustín.
Tengo que confesar que el talento del Filólogo-Filósofo-Poeta-Ensayista-Autordeteatroymás no desmerece la obra de Sine Die que realmente es virtuosa y el conjunto de ambas es manjar para el espíritu. Gracias a ambos por existir con conciencia.
Ana E.Venegas
En el ágora no cabía ni un alfiler, todas las sillas ocupadas y cientos de personas en pie, de donde no se movieron en la hora y media que duró el dispendio de sensibilidad que conformaban las letras de Agustín García Calvo y la música de la cultísima banda que ayer formaban Sine Die.
Hubo un derroche de melodías jocundas y meditativas, surgiendo de instrumentos variopintos, flautas dulces, travesera, bajos, guitarras, Mandolina, Bouzouki, Laúd y percusiones acopladas como una sola voz, para voz la prodigiosa casi trascendental de su intérprete femenina coreada por los músicos en algunas ocasiones.
Me encontré rememorando paisajes medievales, renacentistas, árabes o incluso orientales pincelados con vientos de jazz, llevada de la mano de los ritmos supremos de los arreglos que los hermanos Fernández han hecho para la PALABRA de Agustín.
Tengo que confesar que el talento del Filólogo-Filósofo-Poeta-Ensayista-Autordeteatroymás no desmerece la obra de Sine Die que realmente es virtuosa y el conjunto de ambas es manjar para el espíritu. Gracias a ambos por existir con conciencia.
Ana E.Venegas
Me encanta
ResponderEliminarESTIMADA ANA :
EliminarDesde el corazón te mando todo mi agradecimiento y el de mis compañeros de SINE DIE. Gracias por tus palabras cargadas de benevolencia. Ha sido para nosotros un placer poder cantar y hacer vibrar las Odas y Textos de nuestro genial Agustín García Calvo al que tanto le debemos en memoria y recuerdo. Aún con el regusto en los labios del concierto saboreo cada instante vivido ante un respetable público que supo estar a la altura poniendo su atención y su corazón al servicio. Ha sido un verdadero pacer descubrir entre los asistentes alguien como tú que con tanta amabilidad nos dedica unas palabras.
GRACIAS Y HASTA PRONTO.
PEPA CAMPOS