Se está celebrando en Marbella la segunda
edición de las Jornadas de Patrimonio Histórico 2016. La Delegación de
Cultura y Educación ha organizado un buen número de conferencias centradas en divulgar
el patrimonio histórico y sensibilizar sobre la importancia de nuestro pasado a
la par que ampliar el conocimiento más allá de los yacimientos arqueológicos,
fomentando el interés y el respeto por nuestra historia tanto entre los niños
como los adultos. En este entorno investigador y divulgativo se ha realizado
una visita guiada al Castillo de Marbella.
El arqueólogo municipal de Tarifa y guía
oficial Alejandro Pérez-Malumbres Landa congregó en la Plaza de la Iglesia de
la Encarnación un centenar de personas que lo siguieron en un recorrido
circular en el que se pudieron apreciar las torres defensivas y partes de la
muralla que aún se pueden ver, en algunos lugares, muy imbricada con la
arquitectura actual de la ciudad.
Pudimos sacar en claro que el Castillo de
Marbella es un monumento muy especial que tiene totalmente despistados a todos
los especialistas que se acercan a estudiarlo. Parece ser que se construyó en
una zona privilegiada para poder ver de anteman los movimientos de los posibles
enemigos, en lo alto de un montículo, pero no lo hicieron con planta cuadrada
sino con dos cuadrados que parecen deslizarse en su unión para no coincidir en
su totalidad. En cuanto a su construcción se encuentran sillerías en las partes
más bajas de la muralla, y mamposterías y otros materiales en las que se
conciben como reconstrucciones. Pero, el hecho extraño es que se ha encontrado elementos
puramente romanos, del imperio, en sus bases. La discusión deviene en si son
reciclajes de otros edificios y dónde estaban esos edificios, porque si resulta
ser que el castillo se construyó por primera vez en época romana sería uno de
los pocos monumentos de este estilo en la península y nos encontraríamos ante
un descubrimiento arqueológico de gran calibre.
De todas formas, y según la opinión de
grandes expertos que llevan años estudiando el patrimonio marbellí, lo más
seguro es que sea una construcción de época califal y que para su elevación se
utilizara materiales reciclados de antiguas construcciones romanas. Cuestión
verosímil a la vista de los vestigios romanos que encontramos en la Villa
Romana de Rio Verde, la Basílica paleocristiana Vega del Mar y las Termas de
las Cuevas.
Lo que está claro es que en la antigüedad
las poblaciones ya sabían muy bien dónde se asentaban, ya que en los
alrededores tenemos incluso vestigios púnicos y fenicios. Y no fueron menos los
moradores por décadas del Castillo de Marbella que incluso fue ocupado por
familias que adosaron sus casas a las murallas del perímetro por lo que hace
unos años hubo que derruir muchas de estas infraviviendas para recuperar parte
de la muralla. Tenemos incluso alguna torre que pertenece a edificios actuales
como el de la compañía eléctrica.
La cuestión se complica si fijamos en la
mirada en la muralla perimetral, la que se supone que estaba recortada por un
foso provocado por las corrientes de agua que bajaban por el puente Málaga, Río
Huelo y el de la Barbacana. De esta muralla exterior podemos ver un trozo incluido
en una casa en la calle Peral, pero se conocen incluso las puertas que daban
acceso a la ciudad.
Aunque, del Castillo propiamente dicho
sólo quedan las almenas y muchas de ellas son de reconstrucción, sí queda el
espacio, el lugar donde se desarrolló su construcción, constituyendo una
riquísima fuente de información, de hecho ya se han hecho varias excavaciones,
una de la cual ha dado con un suelo posiblemente romano, lo que aún confunde
más a los expertos.
La cuestión está en estudio, pero lo que
está claro es que la sola visita y discusión de las posibles teorías da para
una mañana de sábado excitante. Casi tres horas nos llevó la visita y en vez de
ir disminuyendo el público, cada vez éramos más.
Ya llevamos varias semanas de estas Jornadas
de Patrimonio que se extenderán hasta el 3 de Diciembre y en la que se han
realizado numerosas conferencias de gran calidad, destaco la del Catedrático de
Arqueología de la Universidad de Córdoba, Desiderio Vaquerizo Gil, que
consiguió dar una conferencia magnífica a pesar de que no funcionaron los
medios técnicos con los que contaba para mostrar las maravillosas fotos de los
mosaicos de la Villa Romana de Rio Verde, fotos de una calidad sublime que
había preparado para ilustrar su tesis.
*Esta información es
sucinta y somera, lo que pudimos extraer de una visita guiada, sin embargo, en
Marbella hay expertos en estos temas, historiadores y los miembros de la
Asociación Cilniana, que llevan años investigando sobre los antiguos pobladores
nuestra actual ciudad y su entorno.
Fotografía: José A.Correa
Galería de fotos del Castillo
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