El pasado viernes se
inauguró la exposición “Siete Artistas Siete Colores” en el espacio expositivo
del Centro Comercial Plaza del Mar. El evento fue un éxito de público, de medios de comunicación y de organización.
La convocatoria surgió del colectivo de
Artistas de Marbella cuyo enclave natural es la Avenida del Mar ya que han
alegrado la avenida durante los sábados de muchos años, ofreciendo una imagen
de la ciudad también implicada en cuestiones culturales y artísticas. Ahora,
tras la imposibilidad de seguir exponiendo en el citado enclave se han visto
abocados a reinventarse. Así que han sentado plaza en el Centro Comercial que
está junto al Paseo Marítimo con una exposición de siete de sus miembros. Una
muestra ecléctica de técnicas, temas e incluso madurez de los artistas.
Maria Ángeles Moreno Serrano presentó una
serie de pintura en cerámicas con motivos figurativos y otros abstractos de
gran complejidad ya que la técnica obliga a pintar sin el apoyo visual pues los
colores y las texturas cambian enormemente al pasar por el horno. Hubo una obra que me hizo recordar algunas de Cocteau.
Lucía Caracuel llenó su espacio de caballos
hermosos con los que cada vez perfecciona más su estilo. Esta Marbellera de nacimiento empezó a pintar de mayor por indicación de su doctor. Es autodidacta y una esponja que aprende de todo lo que ve.
Alejandro Rivera llenó de los azules de su
tierra natal, Marruecos, en una obsesión-recuerdo que el pintor reproduce para
regocijo de sus seguidores. El retrato del mendigo a la puerta de una casa de Chaouen consigue conmover al espectador.
Victor Porlen acudió a la cita con varios
de sus paisajes de inspiración dieciochesca que domina como nadie, no en vano
la pintura la ha vivido desde pequeño en casa pues su padre es el retratista y
autor de pintura religiosa Manuel Portillo.
Rosa Collado sorprendió con algunas
coloristas acuarelas y óleos de parajes andaluces plenos de azules y amarillos
que llenan de optimismo a la par que reflejan una realidad antropológica muy
nuestra.
Fernando Galdón se atrevió más que nadie al reinventar “Los Músicos” de Picasso en una interpretación llena de rosas chicle y verdes que alegraría la mañana del que desayunara en casa frente a ella. Sus compañeros aseguran que Fernando pinta como es y así encontramos divertidas imágenes de la Alhambra entre fauvistas y naïf y otras ocurrencias del artista.
La obra abstracta de Alexander Todorov es
de gran fuerza, por las líneas, los colores y los volúmenes originados. El
artista ha comprendido bien nuestro azules mediterráneos y los rosas imposiblemente
anaranjados de nuestras flores para crear manchas de gran impacto.
La obra quedará expuesta durante una
temporada para que todos podamos disfrutarla. Acercaos al Plaza del Mar, seguro
que alguno de los participantes estarán por ahí y no dudéis en preguntarles y
hablar con ellos, son gente dispuesta a compartir sobre pintura y cultura en
general, por encima aún de la venta de obras, el Colectivo de Artistas de
Marbella es un grupo de amigos bien avenido que disfruta aprendiendo, enseñando
en un ambiente muy solidario.
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