Se acaba de inaugurar la I Bienal de Arte
Contemporáneo en Marbella, organizado por el Centro Cultural Kunsthaus Berlín
Marbella y que se prolongará hasta el 30 de Noviembre.
El tema elegido ha sido la Europa Actual,
con una retrospectiva de 25 años, pero los artistas, que son tan clarividentes,
no han dejado de presentar obras inspiradas en nuestros orígenes clásicos que forman
parte del panorama artístico y cultural actual en nuestros edificios, museos y
nuestras bibliotecas.
Un total de 15 artistas fueron elegidos
para llenar las paredes, los sets y los espacios interiores con un conjunto de
obras de técnicas diferentes que iban desde la escultura al lienzo y desde la
instalación a la fotografía. Todas con una semántica actual en cuanto al
pensamiento y los derechos del ser humano.
Llamaba la atención una escultura de seis metros, envuelta en plástico trasparente yque ocupaba el centro geográfico del Kunsthaus. El autor de esta obra es Fred Friedich, y ha sido creada para esta exposición especialmente, simbolizando el misterio, la tolerancia y el cambio en nuestros días. Así como las cometas que crearon en colaboración Fred y Gunter. una instalación que hacía alusión a la bandera gay de la tolerancia, aceptación y libertad de la persona.
Llamaba la atención una escultura de seis metros, envuelta en plástico trasparente yque ocupaba el centro geográfico del Kunsthaus. El autor de esta obra es Fred Friedich, y ha sido creada para esta exposición especialmente, simbolizando el misterio, la tolerancia y el cambio en nuestros días. Así como las cometas que crearon en colaboración Fred y Gunter. una instalación que hacía alusión a la bandera gay de la tolerancia, aceptación y libertad de la persona.
Esta bienal es un poco especial porque se
han elegido más de una obra de algunos autores, en especial de Ginés Serrán
Pagán que llenó la sala honorífica y nos demostró por qué es un escultor y
pintor reconocido en todo el mundo. Y es que Serrán se atreve con la escultura
más monumental, los materiales más preciosos y burdos, como los bronces en bustos
de pensadores clásicos, con los abstractos de colores más terapéuticos, con
collages, con volúmenes en los lienzos y con los oxidantes y polvos de metal
más innovadores. El ceutí afincado en Nueva York y dedicado al arte desde hace
más de treinta años nos regaló sus obras y su presencia que es en sí una
performance deambulante.
Destacaron también las esculturas en madera
con mucha carga espiritual de Roy Ledgard, los lienzos con materia y óxido de Juan
Carlos Colón para su colección Five Elements, las fotografías magnas, en
especial la de una maniquí envuelta en plástico, que Héctor Vázquez expuso para
hacernos reflexionar sobre la figura femenina en la actualidad; las
instalaciones de las tres mujeres jóvenes en contraste con las tres viejas
jugando cartas de Antonio Cañete o la de la mujer árabe apedreada por haber osado tocar música, los Collages de Gunter Meyer, los grabados de Anai Lago,
los abstractos de Anastasia Dardelin y los cristales de Patricia Azcárate.
También hubo obra del anfitrión y me
gustaron especialmente las dedicadas a Boko Harán y la de Vietnam, tanto en
resina como en collage virtual, especialmente la del fondo negro.
La Bienal ha estado comisariada por Nely
Meyer, alma mater del CC Kunsthaus Berlín Marbella y contó con la asistencia de
numeroso público y autoridades municipales y de la embajada de México. Hubo
varias actuaciones de violinistas y cantantes y fuimos agasajados con un cóctel
de La Nueva Cascada. Pero esto no acaba aquí, durante el tiempo que estén las
obras expuestas se organizarán presentaciones de libros, conferencias,
performance y conciertos.
Texto: Ana E.Venegas
Fotografía: José A.Correa
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